Nuestra Patrona

Santa Filomena Patrona
y Protectora del Rosario Valiente

La Congregación custodia con amor y fe la devoción a esta, Virgen y Mártir de la Iglesia Católica.

Son muchas las personas que nos hacen llegar a nuestra Congregación, testimonios que aseguran que sus oraciones y peticiones han sido escuchadas a través de esta devoción, en situaciones de necesidad y grandes favores, muchos de ellos conmovedores y maravillosos en su esencia.

Recibimos de muchas personas desde muchas partes del mundo, en acción de gracias nos envían fotografías donde nos hacen participes de las bendiciones recibidas a través de la Intercesión de Santa Filomena, así como peticiones escritas, Tarjetas con agradecimiento, así como donativos para el Mantenimiento de la capilla o solicitándonos el envió de estampas, rosarios u otros artículos religiosos que nos apoyan en la labor de difundir esta devoción

Para nosotros es una bendición ser los difusores y guardianes de esta devoción.

Conociendo Nuestra Patrona

Santa Filomena fue una virgen y mártir de la Iglesia, martirizada bajo el Emperador Romano Septimio por el año 202.

Historia

"Yo soy la hija de un príncipe que gobernaba un pequeño estado de Grecia

Mi madre era también de la realeza. Ellos no tenían niños. Eran idolatras y continuamente ofrecían oraciones y sacrificios a sus dioses falsos. Un doctor de Roma llamado Publio, vivía en el palacio al servicio de mi padre. Este doctor había profesado el cristianismo. Viendo la aflicción de mis padres y por un impulso del Espíritu Santo les habló acerca de nuestra fe y les prometió orar por ellos, si consentían a bautizarse. La gracia que acompañaba sus palabras, iluminaron el entendimiento de mis padres y triunfó sobre su voluntad. Se hicieron cristianos y obtuvieron su esperado deseo de tener hijos (...)".

Al momento de nacer le pusieron el nombre de Lumena, en alusión a la luz de la fe, de la cual era fruto. El día del bautismo le llamaron Filumena, hija de la luz (filia luminis) porque en ese día había nacido a la fe. sus padres le tenían gran cariño y siempre le tenían con ellos. Fue por eso que la llevaron a Roma, en un viaje que su padre fue obligado a hacer debido a una guerra injusta; en búsqueda de la paz ante el emperador Diocleciano quien, a cambio de esto, pidió la mano de la niña en matrimonio. Sus padres estuvieron de acuerdo e intentaron convencerla de que estaría muy bien siendo la Emperatriz de Roma.


Ella se negó rotundamente pues les dijo que su vida pertenecía a Jesucristo y cuando el emperador se dio cuenta intentó también convencerla realizando muchas promesas, pero al no poder persuadirla entonces la llenó de amenazas y la encerró en un calabozo de su palacio. Fue atada de pies y manos para intentar convencerla y el emperador la visitaba todos los días para ver si ya había cambiado de opinión. Al ver que lo que hacía no lograba hacerla decir que sí, decidió empezar a torturarla. Fueron 37 días de sufrimiento para la Santa hasta que la madre de Jesús se le apareció para decirle que luego de 40 días su pesar acabaría pero que moriría. Diocleciano, quien insistía constantemente para poder romper su voto de castidad, la mandó a atar a un pilar para que fuera azotada y luego, la envió al calabozo para que muriera.
Un par de ángeles fueron enviados a curar las heridas de la niña y al ver que estaba aún más hermosa, el emperador intentó hacer que se casara con él nuevamente, pero ella se negó por lo que entonces le ató un ancla al cuello y la arrojó al río Tíber. Nuevamente los ángeles le ayudaron a salir y por eso Diocleciano afirmó que era una bruja y que debía de ser muerta con flechas para acabar con ella. Sin embargo, cuando los soldados enviaban las flechas, éstas se devolvían contra ellos. Al ver esta situación, el emperador ordenó entonces que le cortaran su cabeza

Descubrimiento

Su historia se empezó a revelar en el momento que descubrieron sus restos mortales en el año 1802 mientras realizaban excavaciones en las catacumbas de Santa Priscila, en la Vía Salaria de Roma Fue un 25 de mayo de ese mismo años que su cuerpo fue encontrado y se cree que estuvo en el lugar por 1700 años. Tenía una inscripción en su tumba que decía "la paz sea contigo Filomena" y en su tumba se observaron objetos dibujados como un ancla, un par de flechas, una lanza y una palma.

Milagros

A esta santa se le atribuyen un conjunto de milagros, de los cuales existen pocas evidencias. Estos inician con el milagro de su propia concepción. Sus progenitores no lograban tener descendencia, y es así que su médico personal le pide al señor el milagro y los padres de Filomena logran el embarazo. Luego consideran que su devoción a la religión, a pesar de su corta edad también es un milagro.

Pauline Jaricot, la fundadora de la Sociedad para la Propagación de la Fe y del Rosario Viviente, en 1835, por intercesión de Santa Filomena había sido milagrosamente curada de un desesperante mal.

San Juan María Vianney, era muy devoto de santa Filomena, Cierto día enfermó de gravedad y prometió ofrecer 100 Misas en honor de Santa Filomena. Cuando la primera Misa estaba siendo ofrecida, cayó en éxtasis y se le escuchó murmurar varias veces "Filomena". Al volver en sí, exclamó que estaba curado y se lo atribuyó a la santa

También se puede mencionar el milagro de Mugnano cuando la hija de una pareja francesa que sufría de una enfermedad cardíaca que ponía en riesgo su vida. Luego de rezar una novena a la Santa logró llegar al santuario en muy mala condición de salud Cuando estuvo cerca de las reliquias de Santa Filomena su corazón latió demasiado fuerte lo que le produjo un desmayo, todos los que estaban ahí pensaron que había muerto pero cuando despertó, estaba completamente sana

En su mayor parte los milagros, que dicen puede hacer, consisten en la sanación de heridas; así como solucionar conflictos entre las personas. Se dice que puede amparar a los infantes y adolescentes; fortalecer la fe; dar aliento a quienes están desesperados; alejar enfermedades; procurar la concepción de bebés. Su llegada al pueblo de Mugnano, Italia, fue acompañada de una copiosa lluvia; que acabó con casi un año de sequía

Santa Filomena Patrona


Por la historia de santa Filomena, es la protectora de las damas que no pueden tener hijos, de los infantes, del Rosario, de los aprendices, de los adolescentes, su protectorado cubre también las causas complicadas, angustiadas, consideradas imposibles o pérdidas, además puede ser considerada líder o guía de las jóvenes vírgenes, de las mujeres consagradas en cuerpo y espíritu al hijo de Dios, es decir, a Jesús de Nazaret.

Esta santa es el ejemplo de cómo la fe puede vencer sobre la maldad, es el alivio en las situaciones complicadas, alivia el desespero, o solucionar las injusticias, sirve de mediadora para sanar a los enfermos, es capaz de sanar las enfermedades, y por su intercesión se puede lograr el perdón de nuestros pecados.

Santuario y Conmemoración


CUERPO EXPUESTO PARA VENERACION

El santuario de Santa Filomena es el principal lugar de culto católico en Mugnano del Cardinale, en la provincia de Avellino. En el interior se conserva el cuerpo de Santa Filomena virgen y mártir del 10 de agosto de 1805. Es uno de los nueve santuarios de la diócesis de Nola.

Beatificación: Culto Aprobado

Canonización: 30 de enero de 1837 por Gregorio XVI

Festividad: 11 de Agosto Vetus Ordo

Objetos Devocionales

Al mismo tiempo, la Iglesia Católica aprueba y alienta el uso de los llamados "Sacramentales" como signos de piedad. En el caso de Santa Filomena, el uso de los sacramentales difundidos el más ilustre de los devotos de Filomena, San Juan María Vianney son:

  • Corona o rosario de Santa Filomena: es un pequeño rosario formado por una medalla de Santa Filomena o un crucifijo, donde se dice un "Credo"; tres cuentas blancas, donde se dice un "Padre Nuestro" en cada una de las cuentas, para honrar a las tres personas de la Santísima Trinidad; y trece cuentas rojas, que significan la sangre del martirio de Santa Filomena, donde se dice: "Santa Filomena, por tu amor por Jesús y María, ruega por nosotros".
  • Cordón de Santa Filomena: es un cordón de ganchillo hecho con hilo rojo y blanco, entretejido. El blanco se refiere a la pureza y el rojo al martirio de Santa Filomena. La cuerda o cordón es bendecida por un sacerdote, generalmente es usada por el devoto atado a su cintura o en la muñeca.
  • Aceite de santa Filomena: es un aceite común bendecido, que los devotos suelen aplicar en dosis muy pequeñas en el cuerpo e incluso consumirlo, para curar enfermedades. Es bendecido el 10 de agosto y el Santuario de Santa Filomena, en Italia.

Santos Devotos a Santa Filomena

Congregacion Sacerdotal Apostólica de Santa Filomena
Todos los derechos reservados 2021
Creado con Webnode Cookies
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar